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jueves, 1 de junio de 2017

El Foro Social en Madagascar



Un miembro del Foro Social ha viajado recientemente a Madagascar con fines solidarios. Ha estado en dos ONGs: “Deporte y Educación para un Mejor Futuro” y “FAMI”.


Deporte y Educación para un Mejor Futuro:

Es una ONG española creada por Ángel Manzano en 2012 con el objetivo de sacar de la pobreza a los chicos y chicas malgaches, proporcionándoles educación, comida y deporte, todo ello con el baloncesto como punto de referencia. Ángel Manzano fue entrenador en varios equipos de baloncesto de España, como por ejemplo el segundo equipo del Real Madrid. Decidió dar un giro a su vida y ahora vive en Madagascar y es el seleccionador nacional del país, donde ha creado el proyecto SEPA (Sport et Education pour l’Avenir), extendido por 21 escuelas del país, en 4 ciudades a parte de la capital, Antananarivo. Además tiene una academia, en una ciudad pequeña, de 12 chicos de menos de 16 años que destacan en el baloncesto, donde son formados y alimentados correctamente, garantizándoles la asistencia al instituto. También se realizan campus en verano con lo que la cifra de niños y niñas beneficiados es de 3000 aproximadamente.

El objetivo es sacar a los niños de la calle y la mendicidad, haciendo que vayan a la escuela a estudiar y proporcionándoles comida diaria, ya que muchos de ellos tienen graves problemas de crecimiento y de desarrollo intelectual debido a la escasa alimentación (se reparten 70000 comidas al año). El baloncesto es una actividad que realizan con entrenamientos durante la semana y partidos los fines de semana, lo que les fomenta una disciplina y tiempo de ocio y diversión que les hace olvidar un poco su situación. Además, han formado a entrenadores y árbitros, y tienen más de 100 empleados locales trabajando para los niños.

La financiación de la ONG se basa en aportaciones de empresas e instituciones para construir las canchas, donación de ordenadores, material deportivo y equipaciones. Ángel organiza el International Basketball Camp en verano en EEUU y parte de sus ganancias van a los niños de Madagascar también. Otra forma de financiación muy importante es la que aportan los socios mediante sus cuotas periódicas o mediante el apadrinamiento. Se puede apadrinar a un niño o niña, a un equipo o a una escuela o club completos. Además, con la venta de artesanía de Madagascar que se realiza en diversos actos a lo largo del año, también se recaudan más fondos para los proyectos de la ONG.



FAMI:

Es una ONG malgache (de Madagascar) fundada por otro español, Julián Cadenas, que llegó a Madagascar hace 30 años. Su nombre en malgache significa “Asociación para el desarrollo de la Infancia”. Esa ONG tiene muchos frentes abiertos: acoge a niños con raquitismo para alimentarles, operarles y rehabilitarles, mientras van al colegio; tiene una residencia de chicas jóvenes de zonas rurales para facilitarles la asistencia al instituto; tiene otra residencia para la Academia Futuro de Ángel; construye escuelas en zonas rurales y casas para la población con menos recursos; construye pozos; ayuda económicamente a agricultores de arroz, proporciona sanidad y tratamiento dental a la población de la zona...

Nuestro compañero nos cuenta un poco su experiencia:

Madagascar es un país de contrastes. En la capital, Antananarivo (allí se dice Tana), se ven muchos edificios en mal estado y mucha suciedad por la calle pero también mucho todoterreno nuevo, lo que da que pensar en las desigualdades. Los precios de los productos en el supermercado son como en España, al igual que la gasolina. Las calles están plagadas de puestos de mercado de todo tipo de cosas en toda la ciudad, con productos más asequibles para la mayoría de los habitantes. Lo más impactante es la pobreza extrema de muchas personas, sobre todo niños que van casi sin ropa y te persiguen por la calle pidiéndote comida o dinero. A muchos de ellos te los encuentras durmiendo en la calle incluso en las aceras de los túneles con una contaminación insoportable. La capital es una ciudad peligrosa de noche, mejor no salir por zonas poco iluminadas. Tampoco es aconsejable viajar en coche o en autobús por la noche en las zonas rurales porque hay bandidos que te asaltan. Es un país sin ley, donde la corrupción y los sobornos están a la orden del día. Pero, a pesar de todo eso, viajar a estos países sin hacer turismo como tal es una experiencia muy recomendable, por conocer otras culturas y gentes y para valorar y cuidar lo que tenemos aquí.

Algunos datos de Madagascar son los siguientes:

- Más del 80% de la población vive con menos de 1€ al día.

- El 20% de niños no llegan a los 5 años.

- El 59% de la población no dispone de agua corriente en el lugar donde viven.

- El 89% de la población no tiene baño.

- El 30% de población es analfabeta.

- La estancia media en el colegio son 8 años.

- La ONG necesita 1 € para alimentar a 3 niños durante 1 día.

- 1 mes de transporte público para ir al colegio son 3 €.

- Escolarizar a 1 niño durante 1 año cuesta 10 €.

Os voy a comentar lo que hice por allí:

Conozco a Ángel Manzano, el director del proyecto de la ONG en Madagascar. Una de mis dos maletas va llena de chándales que ha donado un club de Ávila, que se repartirán a los niños entre todas las escuelas allí. Lo primero que hacemos es organizar una gran bolsa de zapatillas de deporte, donación de EEUU, para repartir equitativamente entre las 17 escuelas que hay en la capital. Muchos de los niños van descalzos por la calle e incluso en los entrenamientos de baloncesto.

                           Ángel en un entrenamiento de una escuela de Tana

El día siguiente voy a una escuela donde Ángel me explica la problemática: los aros de las canastas están rompiéndose y hay que colocar bordillos alrededor de la pista para que los coches no entren y aparquen, ya que algunos están destrozados (el director del colegio es un poco mafioso y gana dinero por cada coche aparcado en el patio). En los siguientes días me encargo de organizar un poco a obreros para arreglar las cosas. Bajamos los aros, les hacemos un refuerzo en un taller metálico, soldamos la estructura de la canasta que también estaba dañada, mejoramos la estructura, etc. También para los bordillos había que picar el suelo, hacer cemento y hacer con piedras un pequeño muro. Lo que resulta muy curioso es la forma de comprar los materiales, todos ellos los conseguimos en la calle en menos de 200 metros de la escuela (arena, cemento, barras de acero, tornillos, taller de soldadura), porque toda la ciudad es un gran mercado. Un problema que tuvimos es que con la electricidad de la escuela no funcionaba el soldador (quizá por problemas de tensión), así que hubo que llevar las canastas a cuestas con unos carros. En todo esto me di cuenta de que hay que estar muy pendientes de los trabajadores de allí, porque no se organizan bien, no hacen bien el cemento, etc.

                          Reparación de las canastas y bordillos de la escuela

El día siguiente a acabar la obra me acerco al colegio a regar el cemento y veo que ya pueden jugar los chicos. Juego con ellos un rato y de repente todos los niños salen al recreo, casi 300 niños rodeando la media cancha. Nunca había tenido tanto público en mi vida y la experiencia es alucinante: la forma de animar, ver sus sonrisas…es difícil de explicar.

En mitad del viaje estuve una semana en Tsiroanomandidy, una pequeña ciudad a 200 km de la capital. El obispo era de Valladolid y allí es donde está la ONG FAMI dirigida por Julián, que es de Zamora.

Durante mi estancia me alojé al lado de los niños con raquitismo, la verdad es que fue una gran semana. Los niños te dan mucho cariño y con verles contentos ya es suficiente. Con Julián hice muchas cosas: estuve en una pequeña urbanización donde están construyendo casas para pobres. Ayudé a una cuadrilla de albañiles a replantear los cimientos de 4 casas de 4x7 metros y a poner algún ladrillo en otras que estaban en construcción (las construcciones son de ladrillo cocido unido con barro). Según vaya teniendo más presupuesto, irán construyendo más, de momento solo están haciendo 8. Ya hay realizadas algunas con sus 2 pozos para beber agua y sus letrinas. También estuve estudiando con Julián posibles soluciones para unos problemas que les habían surgido, como la reestructuración de un edificio, la derivación de aguas de lluvia que erosionaban un huerto y la rehabilitación del firme de las canchas de baloncesto.


                        Construcción de casas con FAMI en Tsiroanomandidy

También estuve con los chicos de la Academia Futuro de Ángel. Estos chicos entrenan a las 5 de la mañana, a oscuras porque no tienen focos, a las 7 empiezan el instituto y por la tarde entrenan más antes de anochecer. Además, tienen formados a dos entrenadores para ello. Julián y Ángel quieren construir en el recinto de FAMI una residencia y unas aulas para que los chicos de la academia y las chicas de la residencia no se tengan que desplazar tanto al instituto, pero están buscando todavía financiación para ello.

                       Entrenamiento de la Academia Futuro antes de amanecer

Coincidí en esa ciudad con un grupo de 4 personas de Valladolid, amigos del obispo. Habían estado construyendo una escuela en un pueblo cercano y esos días, las dos mujeres del grupo, enfermera y médica, iban por los asilos y residencias curando a los ancianos. Les ayudé a curar un pie comido por la lepra y fue muy impactante ver a una persona en esas condiciones.

                              Entrega de pupitres en un colegio rural

La última semana la pasé con dos miembros de la ONG de España que viajaron al país para conocer de primera mano las necesidades de la población. Con ellos en Tsiroanomandidy fuimos en un coche a llevar unos pupitres que necesitaba una escuela de la zona rural. Nuestra llegada fue un acontecimiento allí, todos los niños salieron a cantarnos una canción como agradecimiento. De vuelta a la capital, los últimos días los dedicamos a visitar escuelas. En una de ellas vimos la escasez de medios para impartir informática. Hay ordenadores donados pero la mayoría ya no funcionan y los cargadores desaparecen. La escuela de la peor zona se encuentra en el barrio de las 67 ha. La fuimos a visitar un sábado, cuando los chicos tenían partidos.

                           Partido de fin de semana en el colegio de 67 ha.

Ángel nos contó la historia de Elisoa, a la que encontró hace años mendigando en la calle con una herida grande en la pierna. La incluyó en el proyecto SEPA y le pagaron el tratamiento de curación. También fuimos a visitar su casa con ella, lo que para mí fue lo más impactante de todo el viaje. Para llegar a ella había que ir entre chabolas por unas calles en las que, a veces, ni cabía una persona. Calles por llamarlo de alguna manera: caminos de tierra que muchas veces tenían como pasarelas de madera a 30 cm del suelo para evitar pisar la basura que se va acumulando. Pasamos al lado de un canal donde el olor a basura y la suciedad es palpable. Y llegamos a una pequeña placita (de 5x5 metros) y allí estaba la casa.

Casa visitada en el barrio de 67 ha. (primera planta) y calle para llegar a ella
Era una construcción de madera muy rudimentaria y Elisoa y su familia vivían en el piso de arriba, por lo que había que subir por unas escaleras que parecía que se iban a romper mientras subíamos. Su casa consistía en un solo habitáculo de unos 2x3 metros (6 m2)... ¡para 6 personas!. Allí vivían sus padres y los 4 hermanos. Un tercio de la casa, el del fondo, era todo camas (una arriba de la otra), el resto era un poco de mesa, una televisión y un pequeño armario para guardar alguna cosa...Ya está. Ni cocina, ni baño, ni armario para la ropa, ni mesa donde comer. Es increíble que haya gente que pueda vivir en esas condiciones.

                                        Canal en el barrio de 67 ha.

La última escuela que visitamos es un orfanato y centro de acogida. Allí el cariño de los niños es mayor que en las demás escuelas, fue un acierto dejarlo para la visita final. Este centro lo gestiona otra española, Mercedes, y alberga a muchos niños y jóvenes en situaciones familiares malas. Allí también estaban jugando los partidos de baloncesto del fin de semana, así que me uní a ellos.

En conclusión, un viaje muy aprovechado y una bonita experiencia, que espero repetir.

Para vuestra información, este fin de semana, la ONG “Deporte y Educación para un mejor Futuro” va a estar en Segovia presente en el Quinto Mercadillo Ecológico y Artesanal de El Carrascalejo (Palazuelos de Eresma), vendiendo productos de artesanía de Madagascar (sábado 3 de junio de 10 a 14h) y en la jornada de fin de curso del Club de Baloncesto Saltamontes, en el pabellón de Valverde del Majano (domingo 4 de junio). A las 13:30 el presidente de la ONG, Ángel, va a presentar la ONG a la sociedad segoviana y además se venderá artesanía en el mismo pabellón para recaudar fondos.


Actividades de la ONG este fin de semana en Segovia (3 y 4 de junio)


Otra actividad que se realiza cada año por parte de la ONG es una comida solidaria en Algete (Madrid). Será la semana que viene, el sábado 10 de junio, y durará desde las 14h hasta las 22h. La comida (paella) y la cena (pollo asado) más cuatro bebidas serán 20€ (5€ para niños). En medio habrá actuaciones como monólogos, un concierto y atracciones infantiles, así como venta de artesanía. Es un plan muy bueno para hacer con amigos o familia. Anímate.






                                      Actividad de la ONG el sábado 10 de junio: paella y pollos

Para más información:

Web de la ONG de Baloncesto: http://www.deporteyeducacionparaunmejorfuturo.org/
Web de FAMI: http://www.famiong.org/indexa.html
Madrileños por el Mundo, Madagascar: http://www.telemadrid.es/mxm/madagascar-el-proyecto-solidario-de-angel
Documental “Historias con Alma. Antananarivo” de la Fundación Real Madrid: https://www.youtube.com/watch?v=povKwAv3YNk
Colgados del Aro, con Iturriaga y Daimiel: https://youtu.be/DxMNZq0Msp8?t=1284

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